Pero para que ella no sienta una diferencia muy grande al ver la comida de los otros niños, siempre leo el menú de la escuela, para hacerle algo similar.
Casi siempre les dan de entrada un caldito o sopita, lo cual se me hace excelente, es una buena forma de hacerlos que se coman las verduras. Así que ahora me la paso haciendo sopas especiales para poner en la lonchera de mi pequeña.
Esta sopita es muy ligera, no la quise hacer crema por completo, prefiero ponerle solo un chorrito al final de leche si es para mi niña, o servirla sin agregársela y poner una jarrita en la mesa para que cada quien le ponga crema o leche al gusto. Creo que así es mas fácil controlar las calorías y disfrutar de una buena sopa.
Ingredientes:
3 zanahorias grandes peladas y partidas en trozos
1/2 cebolla grande en trozo
1 1/2 litros de caldo de pollo
3 ramitas de cilantro (opcional)
sal y pimienta al gusto
1 cucharada de fécula de maíz (maizena) o harina
Un chorrito de leche al gusto
1.- Poner la zanahoria, caldo, cebolla y cilantro en una olla grande y dejar a fuego medio hasta que la zanahoria se ablande.
2.- Licuar todo muy bien con la maizena.
3.- Regresar la sopa de la licuadora a la olla, sazonar al gusto y dejar que de un leve hervor, moviendo constantemente.
4.- Servir muy caliente.
Siempre que se utilice caldo de pollo, hay que verificar y rectificar antes de agregar sal a cualquier platillo, para evitar que nos quede salado. Como me dice siempre mi mama, es mejor que le falte a que le sobre, porque resulta muy difícil "arreglar" una sopa salada. Me gusta servirla acompañada de crotones y de una rebanada de un buen pan, solo hay que recordar no abusar de estas cosas.
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