Pero que buen pan hacen en Portugal. De veras que, existen muchas panaderías (padarias) donde puedes encontrar magníficos productos. Dicen que después del pescado, el pan es una de las mayores riquezas que tiene el país.
A pesar de que entre los 80's y 90's hubo un declive en la producción de pan por la introducción del pan de molde o de forma comercial, en los últimos anos ha vuelto a ganar terreno. Que bueno, porque es un verdadero tesoro el comer este pan de panadería, que ahora también los restaurantes cuidan tener en sus negocios.
En casa nos hemos enamorado del Pan de Sesimbra, el cual últimamente trato de no consumir tanto porque el día que se me ocurre traer un pan, casi nos lo terminamos entero. Este pan en particular es originario de una pueblito pesquero llamado Sesimbra, pero lo hacen en muchas panaderias portuguesas.
Me encanta caminar cerca de dos cuadras a un acogedor y excelente lugar llamado "Pastelaria Páscoa" donde tienen no solo la panadería y pastelería, también una pequeña cafetería donde sirven comidas ligeras.
Temprano se terminan los pasteles de nata y otras delicias, así que mas vale ir a buena hora para alcanzar lo que buscamos. Siempre pido mi pan "fatiado" o sea que me lo entreguen rebanado, para lo cual tienen una maquina que rápidamente se encarga de eso.
Me da miedo cuando compro el pan y me acompaña mi pequeña, porque de seguro que me pedirá una rebanada y como viene recién hecho (calientito en la bolsa) es imposible no comerme una rebanada yo también.
Este pan es ideal para acompañar las comidas y hasta para hacer sandwiches, al estilo del pan artesanal que ultimamente he visto que hacen en las panaderías de los supermercados en el norte de México. Una corteza crujiente que no es muy dura con un migajon suave por dentro, me gusta mucho usarlo para acompañar una buena sopa de crema ¡Mmmmm! ¡Si alguna vez viajan a Portugal, no dejen de probar el pan!
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